La escultura se desarrolló en mármol y reflejó serenidad, sencillez, armonía y equilibrio, siendo una fiel recreación de los modelos clásicos del siglo V a.C. El italiano Antonio Canova y el danés Bertel Thorwaldsen sobresalieron como escultores neoclásicos.
El escultor interpreta las necesidades espirituales del hombre, sus sentimientos más refinados, incluso sus más vagas aspiraciones, además de sus ideas sobre la belleza moral e intelectual. La figura humana se consideraba la más noble de las formas, porque era la encarnación de la más grande creación de Dios. Los teóricos de estética de la época sostenían que el medio más apropiado para representar la figura era la escultura. La estatua desnuda en mármol era una expresión escultural del alma humana, y escultura antigua, por su calma, permanencia y uniformidad de tonos se consideraba un modelo especial mente idóneo para expresar los valores espirituales y materiales que guiaban a la sociedad del siglo XIX.
El retrato también ocupó un importante lugar en la escultura neoclásica, ya que era un retrato idealizado, pero a la vez realista, porque trataba de expresar los sentimientos del retratado.
Los escultores insistían en que el color de las paredes de la habitación en la que se exponían sus esculturas debía ser canela o marrón oscuro, para reflejar sobre la superficie del mármol un color parecido a la carne. La luz debía ser suave y difuminada y no proyectar sombras lineales, ya que las líneas angulosas, al crear formas geométricas, chocarían con las formas de las figuras y del rostro humanos; la luz de gas iba bien porque animaba la superficie. Para la figura de pie o el retrato, la luz debía ser lo bastante alta para que la sombra proyectada por la nariz acabara justamente en el vértice del labio superior, permitiendo ver la boca a plena luz y no eclipsada por la sombra.
En la pintura, no se disponía de modelos de pintura clásica, por lo tanto, el dibujo se basaba en la escultura. A este dibujo se le aplicaba después un color convencional o se dejaba sin color; la luz era clara, difusa y vaga. Por esta razón, los pintores fueron extraordinarios dibujantes, practicando el dibujo llamado de academia, es decir, que copia modelos del natural. Las composiciones se caracterizan por la simetría.
En los temas predominan los clásicos, históricos y mitológicos. Francia será el centro del estilo y el Salón de exposiciones de la Antigua Academia, concentrará a los artistas que expondrán si se adaptan a las normas de la Academia y de un exigente jurado. El Estado será el principal cliente. Napoleón utilizó este arte como instrumento de propaganda; incluso se hacía acompañar de artistas en el campo de batalla para que tomaran apuntes.
El mayor representante, fue el francés Jacques-Louis David,el pintor oficial de Napoleón, tambíen se destacó Jean Auguste Dominique INgres y Fransisco Goya.
"La Fuente" de Ingres.
"Perseo con la cabeza de Meduza" de Antonio Canova. 
"Ninfa atacada por un Escorpion" de Bartolini.
"La Marsellesa! de François Rude.
"Juramento de los Horacios" de David.
"La Familia de Carlos IV" de Goya.